¿Cómo afecta la deficiencia de la Vitamina D, en la Menopausia?
Durante la etapa de la menopausia, muchas mujeres tienen una deficiencia en la masa ósea, como consecuencia de una deficiencia de la vitamina D.
¿Cómo afecta la deficiencia de la Vitamina D, en la Menopausia?
Durante la etapa de la menopausia, muchas mujeres tienen una deficiencia en la masa ósea, como consecuencia de una deficiencia de la vitamina D.
La menopausia; es considerada una etapa donde muchas mujeres tienen deficiencia en la masa ósea, como consecuencia de una deficiencia de la vitamina D.
Las fuentes principales de Vitamina D son la radiación solar ultravioleta, la dieta y los suplementos. La piel aporta un 90% de las necesidades de Vitamina D en el organismo a través de la radiación solar. En los casos de bajos niveles de Vitamina D, se deben revisar los hábitos de la exposición al sol y la dieta, y se debe evaluar la suplementación.
Para tener una salud ósea equilibrada es esencial mantener los niveles adecuados de 25 (OH) vitamina D, y provienen sobre todo de la síntesis cutánea de la hormona, inducida por la radiación solar. También proviene de alimentos, en especial de los aceites de pescados grasos, como el salmón, el atún y la caballa, el hígado vacuno, el queso y la yema de huevo. En la actualidad la industria alimentaria enriquece la leche, la margarina, los cereales y algunas bebidas con diferentes cantidades de esta vitamina.
Se recomienda la ingesta de alimentos funcionales y de suplementos farmacológicos de la vitamina. Sin embargo, la fortificación de los alimentos naturales, tal y como se realiza en la actualidad, presenta varios problemas. De igual forma no existen unas recomendaciones universalmente aceptadas de cuánta cantidad de vitamina D se debe ingerir como suplemento farmacológico y qué población debe ingerirlo. Los datos disponibles señalan que la mayoría de la población se beneficiaría con la ingesta de 800 UI de vitamina D en combinación con calcio.
Deficiencia de la Vitamina D
Ante una deficiencia de vitamina D, el cuerpo no está recibiendo la cantidad de vitamina D requerida para mantener la salud en buen estado. Si se mantiene prolongada dicha deficiencia, se produce el raquitismo en niños y la osteomalacia en adultos.
Este problema afecta no sólo a personas adultas, mujeres postmenopáusicas y ancianos, a más de la población general. No obstante, es importante resaltar que las mujeres postmenopáusicas y los ancianos son poblaciones de alto riesgo de pérdida ósea, por la escasa exposición al sol.
Cabe resaltar que la deficiencia de Vitamina D es frecuente en mujeres postmenopáusicas
Causas:
- Falta de exposición a la luz solar
- Baja concentración de Vitamina D en los alimentos
- La incapacidad de sintetizar la Vitamina D por la piel disminuye con la edad
- Incumplimiento de la toma diaria de suplementos
- Mayoría de población mestiza y afroamericana que son poblaciones de riesgo, las personas con piel oscura necesitan de mayor absorción de la luz solar.
- Porcentaje alto de población con sobrepeso o síndrome metabólico
- Uso excesivo de protectores solares
La prevención de la deficiencia de vitamina D con una suplementación dietaría adecuada y actividad física al aire libre, parecen ser intervenciones adecuadas para evitar fracturas en mujeres postmenopáusicas con baja masa ósea.
Vitamina D en la postmenopausia
La Vitamina D favorece la cantidad y calidad ósea, aumenta la resistencia ósea y promueve la reparación de microfracturas.
La deficiencia de Vitamina D en mujeres postmenopàusicas, se asoció con una mayor prevalencia de Sindrome Metabólico. Tenían además un mayor riesgo de SM, hipertrigliceridemia y HDL elevado en comparación con aquellas mujeres con niveles de Vit D adecuados.
Los síntomas del tracto urinario inferior (STUI) son frecuentes en mujeres postmenopáusicas, esto se ha asociado inversamente con la ingesta de la Vitamina D.
La recomendación de la Sociedad Internacional de Menopausia para la salud de la mujer postmenopàusica requiere una ingesta dietética de referencia (IDR) de 1000 a 1500mg de calcio y de 800 a 1000UI/por dìa de Vitamina D.
El ejercicio físico mejora el estado de la Vitamina D, debiéndose al ejercicio al aire libre y la exposición al sol. Regímenes de ejercicios de 3 sesiones de 30 minutos por semana de actividad física de moderada intensidad para reducir el riesgo de permanecer con una deficiencia de Vitamina D
Pautas de suplementación
A parte de obtener naturalmente Vitamina D en alimentos como el atún y otros, como lo hemos mencionado anteriormente, se puede obtener a través de alimentos fortificados, como: leche, cereales, otros productos lácteos, bebidas de soja, jugos de naranja, entre otros.
Varios estudios de Estados Unidos afirma que el calcio, la vitamina D, y el ejercicio son importantes para mantener los huesos sanos. También advierte que el hábito de fumar y el consumo excesivo de alcohol aumentan el riesgo de fracturas de los huesos.
Muchas mujeres no toman suficiente calcio y vitamina D. El calcio es el componente básico de los huesos, y la vitamina D ayuda a que los huesos utilicen el calcio. Las dos sustancias trabajan juntas para formar los huesos.
Las mujeres necesitan más calcio después de la menopausia
Conceptos relevantes
- La vitamina D esta asociada a múltiples funciones en el organismo, la más importante y más estudiada está relacionada con la salud ósea.
- La deficiencia de la vitamina D a largo plazo, conduce a una pérdida de densidad ósea, que posteriormente lleva a producir osteoporosis, fracturas y otras enfermedades.
- La postmenopausia es considerara una etapa con situaciones de riesgo, por ser una etapa donde muchas mujeres tienen una deficiencia en la masa ósea, como consecuencia de una deficiencia de la vitamina D.
Dra. Teresa Ramos de Ferreira
Registro Profesional 2.935
PRG1232155
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